Sirvienta quiere divertirse con el jardinero haciéndole una cubana

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Descripción

Cada semana viene un jardinero para cuidar el jardín y la piscina. Es una belleza, de verdad, cada vez que veo a este chico quiero ponerme un consolador. Y hoy mi esposo no estaba en casa, era la única oportunidad que tenía de estar a solas con el empleado. Esperé a que terminara el trabajo, no quería que mi esposo sospechara, luego decidí atacar. En la cocina me acerqué al jardinero y le acaricié la polla. No esperé y le di una mamada, su polla estaba salada y eso me puso aún más cachonda, así que continué con una buena cubana. Me apoyé en la posada y follé a lo perrito. Luego seguimos follando tirados en el suelo.