Mi esposa cumplió el sueño de follarse a un negro

Descripción

La mayor fantasía de mi esposa era la de probar el sexo interracial y yo, durante mucho tiempo, hice todo lo posible para que no la cumpliera. Temía que se enamorara de un negro porque le encantan las pollas grandes y yo la tengo bastante pequeña. Me atormentaba la idea de que me dejara por un rabo mejor, pero al mismo tiempo yo le ponía los cuernos con mi secretaria. Cuando se enteró, se cabreó bastante pero el enojo le duró poco. Enseguida empezó a planear la venganza y, para que me perdonara, tuve que dejarla follar con un negro polludo en mis morros. ¡Cuánta humillación sentí al ver a mi mujer disfrutando mientras le chupaba la polla gigante al negro aquel!