Me follé a mi masajista personal porque nos quedamos sin ropa y me puse muy cachonda
Descripción
Últimamente me estaba poniendo cachonda cuando llegaba la tarde. Me daba por meterme a la ducha y masturbarme pensando en los tíos que me he follado. Pero quería probar el morbo de una nueva experiencia, y decidí contratar un masaje personal, con un tío cañón y sin ropa, los dos. Solo de pensarlo me mojé las bragas, así que tuve que quitármelas rápidamente. Cuando llegó a mi casa, me metí a la ducha para estar limpia, y me volví a poner como una cerda pensando en el tío que estaba esperando para darme el masaje.
Salí de la ducha desnuda, lista para que me diera el masaje. El masajista se empalmó rápidamente, le creció la polla de una manera brutal, no pude evitar mirarle. Me tumbé en la camilla y empezó a darme el masaje, pero parece ser que el también era muy cerdo, y las manos le pasaron por mi culo y mi coño rápidamente. Me tuve que dar la vuelta para empezar a tocarle la polla, porque estaba demasiado cerda, y se la chupé, y después me follé a mi masajista, grité como una loca y al final se corrió dentro de mi boca.