La vecina tenía que cuidar al hijo y acabó follándoselo

Descripción

La viuda estaba dispuesta a recomenzar su vida y, para eso, tenía que empezar a salir y conocer gente de nuevo. El problema que tenía era el hijo, ya que no sabía a quien dejárselo. Por suerte, cuando se lo comentó a la vecina, la gorda aceptó encantada que lo dejara en su casa hasta regresar. Claro que eso no era porque fuera buena, sino porque le encantaba tener sexo con yogurines así que, apenas la madre salió por la puerta, empezó a provocarlo. Enseñándole el culo debajo de la falda, con sus sexys medias y su disfraz de policía guarrona, logró ponerle la polla al cien en menos de un minuto. Eso ameritaba un buen castigo que, como no podía ser de otra manera, no sería otra cosa que una buena follada, después de castigarlo con algunos leves latigazos, desnudarlo, masturbarlo y mamarle la polla.